viernes, 25 de febrero de 2011

...

Te echaré de menos pero más echaré en falta la esencia de compañía que portas a tu lado.

El destino hablará, espero, a mi favor.

miércoles, 23 de febrero de 2011

una noche de esas... oscuras.

Me hace reír tu lógica moral y, en ocasiones, me pregunto quién cojones te crees para entrar en mi vida. Engañarme, manipularme y expulsarme de ella sin motivo relacionado.
Sé que estamos solos, una vez más me has tirado al suelo y me has demostrado que no hay más remedio que apoyar los brazos propios, sentir los ánimos de uno mismo y sacar fuerzas de flaqueza. Para qué? Para salir de tu maldito mundo lleno de veneno.

No me importa las noches que hemos pasado juntos, me es indiferente tu sonrisa por la mañana, me da exactamente igual tu risa y conversación inteligente. Sólo me importa tu traición. Esa es la palabra, traición, desconcierto.

La cultura no te justifica ni te hace esclavo.

Eres lo que eres y lo peor de todo es que empieza a no importarme.

domingo, 20 de febrero de 2011

galimatías.

Dime raciocinio dónde te encuentras? La lógica de la moral se dispersó entre las manos de arena de aquella nínfula de cristal.
Ves el anochecer de lo perpetuo? La historia circular que no semeja tener más final que tus garras mugrientas manchadas de traición y mentira.
Fijo mi mirada en ninguna parte y me cuestiono cómo he llegado a este punto central de no retorno. La asimilación del fatum solitario,donde la compañía radica en la soledad del cuaderno de bitácora de tu pared inexistente.
Acompáñame, sentémonos en esta orilla sin mar y digámonos,sin parar, todas esas mentiras que me cuentas para dormir.

Sabes, perfectamente, que eres mi peor pesadilla favorita.

viernes, 11 de febrero de 2011

Siempre se encuentra algún verso dentro la carpeta del olvido.

RETORNO            (GALEGO)      
                                                                                                                                                      
De entre a brétema xordes                                
Exultante e cheo de forza
mais ao ollar pra min, Pobre!                          
Miserable, axeonllada no chan. 
                                                                                 
A escuridade da noite                                    
lévame, desaparezo.
Deixo de ser perceptible.
Mais ao ti avanzar vou eu.

Berro entre as ialmas,
 non me abandones, non te vaias
Pero canda momento que pasa,
máis afastado estás.

E de novo retornamos
a este punto do bosque.
Prégoche de novo.
Outra vez claudico.
E ti, riseiro e burlón
desapareces entre a néboa.


RETORNO (CASTELLANO)

ENTRE LA NIEBLA RESURGES
EXULTANTE Y LLENO DE FUERZA
 MAS AL MIRARME, ¡POBRE!         
¡MISERABLE!
SUPLICANTE EN EL SUELO

LA OSCURIDAD DE LA NOCHE
ME LLEVA, DESAPAREZCO
DEJO DE SER PERCEPTIBLE
MAS TRAS TU CAMINAR
AVANZO YO

GRITO ENTRE LAS ALMAS
“NO ME ABANDONES, NO TE VAYAS”
PERO CADA MOMENTO QUE PASA 
MÁS ALEJADO ESTÁS.

Y DE NUEVO REGRESAMOS
A ESTE PUNTO DEL BOSQUE
RUEGO DE NUEVO
OTRA VEZ CLAUDICO
 Y TÚ, SONRIENTE Y BURLÓN
DESAPARECES ENTRE LA NIEBLA

miércoles, 9 de febrero de 2011

Una carta escrita sin motivo aparente. Devagar.

Dublín, Irlanda 03/08/__9
Entre las llanuras de la amargura me hallo de nuevo. No debería sorprenderme puesto que recorren la geografía de mi pasado. Un abandono más o, por lo menos, un intento de él, se cierne sobre mi existencia. Sin embargo, en esta ocasión el punto y final lo pondré yo.
Y en este contexto, en esta situación, sentado en un baño de Dublín, te digo adiós. Cinco minutos, ni uno más le daré al luto por tu marcha. Sólo lo que te mereces o, más bien, lo que me merezco yo.
Los recuerdos se aglutinan en mi mente con el único propósito de hacerme consciente de lo que dejo atrás y lo que no se volverá a repetir jamás porque, sencillamente, destruí el camino de regreso con mis propias manos.
No siento pena. Son desilusión y decepción, quizá, las palabras que mejor definen mi estado actual. En el momento en el que me levante y abandone este cuarto haré caso omiso de mis emociones  y borraré su caminar por mi conciencia.
Lo que me depara el destino después de este universo lo ignoro. Sencillamente espero que ningún elemento y  ningún personaje que hayan formado parte de esta vida que dejo atrás se encuentren en el lugar al que voy. Quizás no exista nada. Ojalá sea así. Sentiré paz. Tranquilidad. Dejaré de existir y viviré sólo en el aire que recorre su figura mientras, llorando, me recuerde como aquel demonio que la atormentó sin piedad.
Así me voy y así he vivido. Sin ningún remordimiento se despide:
                                                                                              El galimatías de la soledad.

martes, 8 de febrero de 2011

Realidad purpúrea

No te engañes. No te quiero. No sonrío cuando llegas ni me hundo en la oscuridad de los recuerdos cuando te alejas. No eres nada. Ente banal. Estímulos racionales que me hace hablarte.
No eres quien de allanar mi mente con tu presencia. Ni siquiera tu olor me remite a lejanos paisajes exuberantes de sentimientos ausentes y vivos. Reflejo de muerte perpetua.
No te culpo. No eres digno pero ¿Quien lo es? ¿Lo soy yo, acaso? La psique impuesta. Energía vital innata que nos conforma y nos aleja, así como tu ser es tan ajeno al mío. Sólo frío. Sólo neuronas en movimiento. No hay magia. No hay  pasión.

No te conozco, ni quiero hacerlo. No me interesa tu mundo interior. Te presentas y hablas. Monólogo sin fin que adormece mi mente. Juego de seducción precario que abruma al espectador del acto dantesco que presencia. No te disculpes. Te perdonaría si fuese necesario y sólo sería una prueba más de mi indiferencia hacia ti. Prácticamente todo lo es ahora mismo. Las gotas descienden danzantes por el reflejo de los edificios inertes presentes en mi ventana y pienso en ti.

Tú, Demian, con tu pelo normal, tu estatura normal, tu vida monótona. No me sorprende. A veces me pregunto qué puedes pretender al acercarte. Realmente crees que puedo reparar en alguien como tú. Feliz, desenfadado, ignorante con el mundo de los pensamientos cortantes. No sé quien eres, ni quien pretendes ser. Sólo sé que no serás nunca nada cercano a mí porque el árbol que crece a la sombra de otro mayor tarde o temprano será relegado de su lugar y destinado al mundo de las sombras.

No eres digno.

No eres digno de sufrir el mundo maldito que lleva por seña mi introspección.

jueves, 3 de febrero de 2011

A xénese do camiño sen nome.

A esencia do ar,
dunha mañá de verán,
axexando entre as herbas
grileiras,
reflíctese no teu ollar.

Suspiros calados,
escadan a túa figura
namentres os beizos
bailan ao son
das cantigas das lembranzas.

Os ecos dos sorrisos
constitúen a atmosfera
destas catro paredes.

Un univeso efímero
percorre os recunchos
de dúas ialmas
en consonancia.

Melodías que se descobren
para ignorarse de novo
dentro dunha sintonía
,banda sonora dun mundo
sen compaixón,
onde os amantes se agochan,
nos ocos da traición.

~ Siara ~